San José

Delizias Bakery el negocio familiar hispano que deleita el paladar de residentes de la Bahía

La familia tiene 14 años labrando su futuro y ya cuentas con cuatro sucursales.

Telemundo

La unión y el ímpetu de la familia Rueda ha logrado sacar adelante la panadería Delizias Bakery.

“Mi hija es un proyecto que trae desde niña, y mi hijo, mis sobrinos, todo es una empresa familiar y estamos creciendo y lo más importante son ellos que vienen empujando”, aseguró Elizabeth Lara, dueña de la panadería.

El negocio inició en San José impulsada por el sueño de su hija quien hoy, anhela seguir con la tradición.

“Soy contadora, pero espero en el futuro continuar la panadería quiero abrir café, panadería y más cafés”, aseguró Frineth Ruada, hija de Elizabeth.

“Desde muy chiquita hacía sus inventos, le empezó a gustar hacer gelatinas y entonces yo le seguí el juego y nos gustó”, indicó Elizabeth.

Esta familia tiene 14 años construyendo su sueño.

“Yo dije si yo me voy tan lejos, me separo de mi familia, mi madre, mis hermanos mis amigos, es para hacer algo”, explicó Elizabeth

Y su mano derecha ha sido Tele Estudillo.

“Tenemos una amistad muy grande de muchos años, compartimos ideas en común y es lo que nos ha llevado al continuar con el negocio”, dijo Tele.

Ellos no eran expertos en pan. Se hicieron, rodeados de quienes saben, como José Cruz, el maestro panadero de la sucursal de Monterey Road, que tiene más de 38 años de experiencia.

“A los 11 años ya era yo maestro de una panadería”, aseguró José.

Y agradecen haberse rodeado de gente que les ha dado la oportunidad de aprender.

“Yo era chofer de una compañía y mi esposa fue la que se empezó a interesar por los pasteles, entró a una tienda muy conocida hace años había una tienda en la Story,  gracias al señor Juvenal porque es la verdad gracias al señor Juvenal que hizo una escuela para mucha gente”, añadió Gustavo Rueda.

Hoy en día tienen cuatro sucursales, pero quieren ir por más. La pandemia solo les dio el impulso para seguir creciendo y tender la mano a los suyos.

“Gracias a Dios podemos vivir de nuestros negocios, la educación de mis hijos ayudar a mi mamá que todavía la tengo y a mis hermanos”, dijo Elizabeth.

Y su plan es seguir ayudando, son conscientes de que tienen la oportunidad de hacerlo y no lo van a desaprovechar.

“Porque estoy contento, porque generamos trabajo para nuestra gente para nosotros para nuestros hijos”, indicó Gustavo.

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