Familiares identificaron a Nadia Tirado como la joven, de 18 años, que murió el domingo durante la celebración de una fiesta de cumpleaños en Antioch.
“Que hagan justicia para mi hija porque ella era inocente. Ella nomás quería ser feliz”, aseguró la mamá de Nadia, quien prefirió no ser identificada.
Nadia murió tras recibir un disparo en el abdomen mientras disfrutaba la fiesta.
“Creo que fue un accidente porque era una persona muy amable”, dijo la mamá de Nadia.
La hermana de Nadia relató que fueron invitadas por una amiga y que juntas asistieron a la casa ubicada en la cuadra 3300 de Sunset Lane Street. Al llegar, dice que adultos estaban haciendo inspecciones corporales a los que querían entrar a la fiesta para asegurarse de que no estuvieran armados.
“Estábamos bailando, juntas, riéndonos todos, luego de repente sacaron unas pistolas”, relató la hermana de Nadia, quien prefirió no ser identificada.
Según el jefe de policía de Antioch, Steven Ford, quien respondió al lugar, en la casa había unas 50 personas, se trataba de una fiesta privada en celebración a un logro académico y no creen que el tiroteo se trató de una entre pandillas.
“La familia que organizó la fiesta tomó las medidas de precaución necesarias al hacer estas inspecciones en busca de armas”, dijo Ford.
Testigos señalan que la persona que abrió fuego llevaba puesta una máscara de esquí y ropa negra pero que usar máscaras en ese tipo de fiestas es algo común por lo que no les pareció sospechoso. Aseguran que la balacera comenzó cuando se les negó la entrada a los sospechosos.
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Nadia fue la única víctima mortal pero otras 6 personas resultaron heridas.
“Hace dos años sucedió otro homicidio en esa misma cuadra. De hecho muy cerca de la casa de este último tiroteo, pero descartamos que los casos estuvieran relacionados”, dijo Ford.
Los abuelos de Nadia originarios de Jalisco, México, reclaman la ayuda de las autoridades.
“Sintiendo la perdida como tantos padres que han estado perdiendo últimamente a sus hijos por culpa de las armas y los congresistas que no quieren hacer nada por controlar las armas”, aseveró Sabino Rangel, abuelo de la víctima.
Nadia tenía 3 hermanos y la recuerdan como una joven con muchas ganas de vivir.
“Siempre que veíamos en las noticias a sus mamás llorando por sus hijos, nunca nos imaginamos que nos iba a tocar a nosotros”, dijo Livier Martínez, abuela de la víctima.
Hasta el momento no se han hecho arrestos en este caso, es más, la policía no tiene aún una descripción del o los sospechosos por eso les piden a los testigos que los ayuden para dar con los responsables.
Según la información de los que organizaron el festejo, ellos no conocen ni identifican a quien abrió fuego porque aseguran que llegaron personas que no fueron invitadas y que cuando intentaron registrarlos para saber si iban armados entonces comenzó la balacera.
