Conductores en el condado San Mateo que transitan la autopista 101 podrían pasar menos tiempo atorados en el tráfico, al menos, esa es la idea detrás de un proyecto de 22 millas que propone expandir los carriles rápidos en esa carretera.
Mike Swire es miembro del Comité Ciudadano de Asesoría de la Autoridad de Transporte del condado de San Mateo y explica que la agencia está considerando dos opciones para la instalación de esos carriles en la autopista 101, al norte de la 380 en San Bruno: ya sea agregando más carriles, o convirtiendo los que ya existen.
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Los encargados del proyecto indican que aún no hay preferencia por cualquiera de esas opciones. Al momento, se están realizando estudios ambientales y de tránsito, antes de tomar una decisión.
Pero quienes se oponen, como el alcalde de South San Francisco, James Coleman, argumentan que la expansión de carriles rápidos divide a los conductores en dos clases, aquellos que pueden pagar el peaje, y aquellos que tendrán que aguantar el tráfico.
Además, hay preocupaciones sobre el impacto ambiental en las comunidades aledañas a la autopista.
Coleman señaló que muchos de esos vecindarios incluyen gente latina de bajos ingresos que estarían expuestos a la contaminación causada por más autos. El alcalde dijo que el condado debería enfocarse en incentivar el uso del transporte público.
Críticos también argumentan que el dinero podría ser invertido en reparar baches y otras imperfecciones de la carretera.
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Se anticipa una decisión para noviembre, después de los estudios ambientales.
El costo aún no se ha definido, pero podría ser de más de $20 millones en ingresos de peajes de la vía rápida existente en la 101 que transita desde el condado Santa Clara hasta la 380.
