La policía anunció el miércoles el arresto de dos de los presuntos responsables del tiroteo que dejó muerto a un oficial de policía a finales de diciembre en Oakland.
D. Allison, jefe interino de la policía, identificó a Mark Sanders, de 27años, y a Allen Starr Brown, de 28 años, a quienes les presentaron cargos por asesinato tras el tiroteo ocurrido en el área de Jack London Square donde murió el oficial Tuan Le.
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Allison informó que las detenciones de estos individuos se dieron 95 horas después del asesinato.
Brown fue arrestado la noche del 31 de diciembre en la ciudad de Chico, mientras que Sanders fue arrestado en la madrugada del 2 de enero en Livermore.
Además, destacó que la decisión de no revelar los nombres ni la cantidad de personas involucradas en este caso es crucial para preservar la integridad de la investigación, especialmente porque existen sujetos adicionales por arrestar.
Adicionalmente, un tercer sospechoso identificado como Sebron Ray Russell, de 28 años, enfrenta cargos por robo.
Por su parte, Pamela Price, fiscal de distrito del condado Almeda, dijo que el cargo de asesinato contra Sanders vino con una alegación especial de que sabía que le era un oficial de policía cuando le disparó y lo mató.
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Su oficina está trabajando para reunir suficiente evidencia que permita obtener una condena de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
"También hemos acusado a un tercer individuo que creemos participó en la serie de robos que precedieron al asesinato del oficial Le", dijo Price.
Además, la fiscal aseguró que el miércoles se reunió con los familiares del oficial Le, conversó con ellos sobre la investigación y los cargos presentados contra los arrestados, con el objetivo de buscar justicia por su ser querido.
Se espera que Sanders haga su primera aparición en la corte el jueves en la mañana.
Entre tanto el concejal Noel Gallo dijo que se reunirá con la alcaldesa Shen Thao para pedirle que declare el estado de emergencia, no solo por lo ocurrido con el oficial Le, pero además por las dos muertes que se dieron durante el fin de semana pasado relacionadas a espectáculos ilegales de autos, donde uno terminó en un tiroteo y el otro con un atropellamiento mortal.
Declarar estado de emergencia explicó el concejal Gallo, puede facilitar pedir más ayuda de la que ya se tiene, en una ciudad que ya lleva casi un año sin un jefe titular de la policía.
"Pero es muy importante que la alcaldesa y el concilio trabajen juntos para demandar ayuda del estado de California y también de los federales" aseguró Gallo.
