Las autoridades de salud del Condado Contra Costa determinaron que la fuga de sustancias químicas de la refinería de Martínez, ocurrida en noviembre de 2022, no incrementó el riesgo de contaminación pública.
Explicaron que para llegar a esa conclusión analizaron los metales en 14 muestras de suelo, entre ellos plomo y arsénico, usados habitualmente en la industria pesada y agricultura, y determinaron que están dentro de los rangos aceptados para no causar daños a la población.
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A través de un comunicado, el presidente de la Junta de Supervisores, John Gioia, agregó que también le pidieron a la refinería que tome medidas para que estos incidentes no ocurran nuevamente.
También quedó sin efecto la advertencia que se publicó en marzo pasado, con la que le pedían a los residentes que no consumieran productos cosechados en los terrenos que estaban en la zona implicada por la fuga, ya que en ese momento se especulaba que podrían estar contaminados.
Las autoridades agregaron que siguen investigando qué causó el escape de estos materiales, y el Fiscal de Distrito informó que está considerando emprender acciones legales contra la refinería por no notificar adecuadamente cuando ocurrió este incidente. De hecho, resaltaron que los funcionarios de salud se enteraron a través de redes sociales.
