Patty Poppe, presidente de PG&E ofreció el viernes una entrevista exclusiva a Raj Mathai de nuestra estación hermana NBC Bay Area, donde uno de los temas abordados fue su reconocimiento de que la confianza en la compañía ha sido cuestionada.
"Sabemos que la percepción ha sido desafiada. Creo que la compañía está en un camino para reconstruir la confianza con las personas a las que servimos", indicó Poppe.
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Uno de los mayores desafíos que enfrenta Poppe como directora ejecutiva, es el aumento de las tarifas, que desde 2019, han aumentado prácticamente el doble, más del 100% desde entonces. Solo el año pasado aumentaron un 22%.
“Creo que es realmente importante, en primer lugar, que nuestros clientes sepan que nosotros sabemos lo que estamos haciendo. Nuestros aumentos más recientes se basan en algunas recuperaciones de costos pendientes", indicó.
Aunque reconoce que los clientes no ven inmediatamente los beneficios, aseguró que están trabajando para reducir los precios en 2025 y 2026, gracias a la modernización de los métodos de trabajo y la revisión de los mandatos estatales que influyen en las tarifas.
"A medida que aumenta la demanda de electricidad, podemos reducir el costo unitario de la energía con nuevas y mejores tecnologías y gestión de carga que nunca antes habíamos podido hacer, pero tenemos que empezar por tener una red segura y resistente para impulsar el progreso de esa transición hacia la energía limpia", dijo.
Poppe también abordó las preocupaciones sobre su propia compensación, de aproximadamente entre $28 y $30 millones en promedio por año.
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"Mi compensación depende al 100% del éxito y bienestar de la empresa, y cuando digo "en riesgo", se basa en nuestro desempeño en seguridad, en la reducción del riesgo de incendios forestales, en la satisfacción y confiabilidad del cliente, y en el desempeño financiero, porque eso es lo que se mide en una empresa bien gestionada", afirmó.
A pesar de los desafíos, Poppe se mostró optimista sobre el futuro de PG&E, destacó los avances logrados hasta ahora, como la reducción del riesgo de incendios en un 94%.
Reconoció que todavía hay trabajo por hacer, pero reafirmó su compromiso de trabajar hacia un futuro más seguro, sostenible y asequible para los clientes de PG&E.
