La comunidad de Oakland pide justicia en nombre de Aristeo Zambrano, el dueño de un taller que fue baleado mortalmente a principios de mes.
Familiares y líderes comunitarios organizaron una demostración el domingo para exigirle a la ciudad que no solo resuelvan este crimen, sino, además, que tomen acción sobre la ola de violencia que azota a la ciudad.
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Aristeo, de 68 años, fue baleado poco antes del mediodía el 3 de febrero dentro de su taller ubicado en la cuadra 8800 de International Boulevard.
“Mi abuelo era un buen hombre”, aseguró José Zambrano, nieto de Aristeo.
Zambrano aseguró estará harto de la delincuencia y culpó a los líderes de la ciudad.
Activistas lamentaron que le arrebataron el sueño americano a Zambrano, quien abrió su taller hace más de 30 años luego de destacarse por su activismo a favor de los derechos de los campesinos en los años 70.
“Trabajaba como obrero en las fincas con el señor Cesar Chávez y era activista. Era uno de los primeros en el movimiento para los hispanos, más filipinos juntando con los mexicanos”, dijo Eduardo Escobar, organizador de la protesta.
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Ahora esperan que su homicidio no quede impune, y que, además, la alcaldesa Heng Thao declare un estado de emergencia por la ola de violencia.
“Cada persona, cada muerto, no es solamente un número, es parte de la humanidad. Este señor contribuyó bastante a la humanidad, participó en algo que formó la historia del movimiento de los hispanos empezando en California. Eso es fuerte”, aseguró Escobar.
“Hay muchos que nos están llamando un grupo extremista, pero somos vecinos y ciudadanos aquí con mucho dolor en nuestra alma porque estamos perdiendo nuestro tío, abuelo, negocios, hermanos, familia”, aseveró Jennifer Tran, presidente de la Cámara de Comercio Vietnamita.
Hasta el momento se desconoce el motivo del homicidio y familiares de Aristeo continúan pidiendo el apoyo del público para dar con el o los responsables.