Conducir bajo la influencia del alcohol podría costarte caro

Conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas podría conllevar a que una persona enfrenta cargos criminales, pague cuantiosas multas y hasta cumpla tiempo en la cárcel.

Telemundo 48 habló con las autoridades con el objetivo de entender un poco más las consecuencias que los conductores pueden sufrir al cometer este tipo de crimen.

Steven Aponte, vocero del Departamento de Policía de San José, explicó que cuando una persona es detenida por estar bajo la influencia de las drogas o del alcohol pueden ocurrir varias cosas.

“Lo que eso lleva es que el vehículo en el que estaba manejando primeramente es remolcado. La persona luego va a cárcel donde va a esperar por el juez. De parte de la fiscalía puede traer multas que incrementan desde $5,000 hasta  $10,000”, dijo Aponte.

En caso de que un conductor se vea involucrado en un accidente en el que haya heridos o muertos las consecuencias son aún más graves.

“Puede tener tiempo que incluye una felonía y por lo menos un año en prisión”, indicó Aponte.  

Una vez que un oficial realiza una parada de tráfico y determina que el individuo está conduciendo bajo la influencia de alcohol o drogas, se cumplen procedimientos para determinar si es culpable e imponerle un DUI. 

“En la escena va a haber una prueba que oficiales hacen para determinar si las personas pueden manejar o caminar o moverse. Además de esto van a tomar un poco de sangre o respiración para detectar por medios científicos si hay alcohol o drogas en el sistema”, aseguró Aponte.

Para aquellas personas que se encuentra aplicando a DACA o legalizando su estado migratorio en el país, podrían perder sus beneficios migratorios.

“Puede que le nieguen la aplicación también pero también puede que lo usen como un factor negativo y no los descalifiquen automáticamente. La cosa más riesgos sería si tienen más de un crimen o arresto por DUI”, expresó Eliana Corona, directora de Servicios Legales SIREN.  

Aponte recomienda a las personas que van a beber que llamen a un Uber o Lyft para evitar contratiempos con las autoridades.