El Gobierno de México convocó el miércoles a un debate amplio, plural y transparente sobre el uso de la marihuana, a fin de definir en los próximos meses la política para hacer frente al fenómeno de las drogas, que afecta a millones de mexicanos y trasciende las fronteras del país.
En un mensaje a los medios de comunicación, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio, destacó que México "está llamado a ser referente de lo que debe ser un diálogo responsable y plural sobre un tema que trasciende fronteras".
Con esa visión, el presidente Enrique Peña Nieto pidió en noviembre a la Secretaría de Gobernación impulsar un debate "transparente" sobre la marihuana con la participación de expertos, académicos, organizaciones civiles y servidores públicos, recordó.
El mandatario dijo entonces que personalmente estaba en contra de la legalización de la marihuana porque abre el camino al "consumo de drogas mucho más dañinas", pero llamó a abrir un debate para establecer la ruta a seguir al admitir que no es el "dueño único de la verdad".
Dicha decisión fue detonada por el fallo de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia emitido el 4 de noviembre, en el que declaró inconstitucional la prohibición absoluta del consumo personal de la marihuana en la Ley General de Salud.
Con su resolución, los magistrados del alto tribunal autorizaron a cuatro querellantes usar la hierba con fines recreativos, al considerar que la legislación afecta al derecho al libre desarrollo de la personalidad y autodeterminación frente a su consumo.
Osorio explicó el miércoles que el debate en torno a la marihuana debe incluir los conocimientos y experiencias de la sociedad, examinar las particularidades del fenómeno en México y tomar en cuenta las experiencias internacionales en la materia.
México
El objetivo es hacer un análisis amplio de los diferentes enfoques del tema, sus costos y beneficios, su impacto en la salud pública, la prevención y los derechos humanos, así como en los aspectos económicos de regulación y seguridad ciudadana, detalló.
Para ello, dijo, el Gobierno creará en enero una plataforma digital para poner a disposición de la sociedad publicaciones académicas y científicas para informar "de manera objetiva sobre las distintas implicaciones de este tema".
La finalidad es integrar una "base de datos duros y cifras que puedan ser utilizadas para estudiar este fenómeno, crear un espacio de participación" para que los ciudadanos puedan expresar sus opiniones y dar seguimiento al desarrollo del debate, indicó el ministro.
También se llevarán a cabo cinco foros regionales abiertos al público con la participación de expertos mexicanos y extranjeros, a fin de que analicen y discutan los escenarios e implicaciones del consumo de marihuana.
El primer foro estará dedicado a la salud pública y la prevención y se realizará la tercera semana de enero de 2016 en el sureste del país, y el segundo abordará la perspectiva ética y de derechos humanos y se llevará a cabo en la región noroeste a principios de febrero.
El siguiente, a celebrarse la tercera semana de febrero en el norte del país, estará centrado en los aspectos económicos y de regulación, mientras que el cuarto foro convocará en el centro de México a expertos la primera semana de marzo para abordar la seguridad ciudadana.
El quinto se llevará a cabo la tercera semana de marzo en la capital mexicana y abordará en su conjunto los temas debatidos en los cuatro foros previos.
Las relatorías de los foros se pondrán a disposición de la opinión pública para su consulta, al tiempo que serán enviadas al Legislativo para contribuir al debate en ese órgano, señaló Osorio.
Además, el Gobierno mexicano realizará consultas internacionales para recoger las experiencias de otros países en la materia y "analizar su impacto a la luz de nuestra propia realidad".
A través de sus embajadas, dijo, impulsará un diálogo bilateral con naciones estratégicas a fin de "recabar datos duros y evidencia empírica sobre las implicaciones de diversas políticas públicas implementadas en otras naciones".
Todas estas medidas, explicó el ministro, permitirán al Gobierno "tomar las mejores decisiones" y definir en los próximos meses con qué política habrá de hacer frente a un fenómeno que afecta diferentes espacios y aspectos en la vida de millones de mexicanos".
"Se trata de un gran reto, que exige apertura y visión de largo plazo, (...), transparencia y corresponsabilidad", unos principios que, añadió, también deben regir en el debate que se llevará a cabo en la sesión especial de la Asamblea General de la ONU sobre las drogas en 2016.
El Gobierno de Peña Nieto busca llegar a esa sesión con una "postura dirigida a promover soluciones globales frente a desafíos compartidos", aseveró.
