Escabrosos detalles entorno al cartel de Sinaloa

Un testigo dijo que el temor lo embargó cuando presuntamente vio a un hombre desnudo y encadenado a un lado de la carretera en dominios del cartel.

NUEVA YORK – Un informante clave en el llamado juicio del siglo contra Joaquín "El Chapo" Guzmán testificó el miércoles en el tribunal federal de Brooklyn.

Se trata de un aliado del ex líder del cartel de Sinaloa, quien lo ayudó a hacer negocios en territorio estadounidense, aunque más tarde se convirtió en informante de la DEA.

Pedro Flores, quien operaba en Chicago un negocio de distribución de cocaína y heroína con su hermano gemelo Margarito, reveló que hizo grabaciones secretas de las negociaciones con Guzmán y con el hijo de este.

El jurado escuchó con atención como Margarito Flores brindaba un número telefónico a un individuo que fue identificado como Jesús Alfredo Guzmán Salazar, alias “Alfredillo”, el hijo de Guzmán.

"Mi hermano le estaba dando un número de teléfono donde se suponía que “El Chapo” debía llamarnos", declaró Pedro.

Flores, de 37 años, quien vestía un traje azul oscuro, parecía nervioso de testificar el miércoles contra su exjefe. El testigo de la fiscalía se dirigió al capo como "el hombre" en varias ocasiones durante el feroz interrogatorio.

Sin embargo, el fiscal federal adjunto Adam Fels presionó a Flores para que especificará a quién se refería con “el hombre”, por lo que el testigo dijo atemorizado “señor Guzmán”.

Flores reveló que él y su hermano se convirtieron en informantes después de que su posición privelegida en el cartel pasara de ganar dinero a borbotones con el tráfico de cocaína y heroína, a elegir bandos en una sangrienta guerra.

"Mi esposa se embarazó en 2008 y pensé en nuestro futuro, es decir, en nuestra falta de futuro", expresó Flores con nerviosismo. "No podría prometerles un futuro. No podría prometer a mi familia un mañana".

El testigo afirmó que cada lado exigía lealtad absoluta, incluso a costa de su vida o la de sus familias.

UN TENSO PRIMER ENCUENTRO CON “EL CHAPO”

Flores dijo que la primera reunión con Guzmán ocurrió en México en mayo de 2005.

Los gemelos habrían abordado una pequeña aeronave, que aterrizó en una pista clandestina en las montañas, donde se ocultaba el capo. 

Pedro dijo que el temor lo embargó cuando presuntamente vio a un hombre desnudo y encadenado a un lado de la carretera. Los hombres de Guzmán le informaron, entre risas, que se trataba de alguien que se había metido con el cartel.

Flores hizo referencia al humor del capo en su primera reunión. “El Chapo” habría hecho una broma acerca de sus pantalones cortos.

"Dijo que con todo ese dinero (que obtenía en el tráfico de drogas) y no podía pagar el resto de mis pantalones", recordó Flores en la corte.

El testigo dijo que un grupo de hombres armados se rieron a carcajadas, un hecho que lo intimidó aún más.

VIDAS QUE INICIARON AZOTADAS POR EL NARCOTRÁFICO

Flores explicó que él y su hermano comenzaron su vida en el narcotráfico desde la infancia. Pedro tenía solo 7 años cuando ayudó a si padre a traducir en transacciones de drogas.

"Mi hermano y yo nacimos mientras mi padre estaba en prisión", comentó Flores. "Quería algo mejor para mis hijos".

El aparente arrepentimiento de los gemelos Flores los llevó a colaborar con la DEA en la grabación secreta de negociaciones con “El Chapo”.

Los Flores habrían grabado las conversaciones con una pequeña grabadora de voz que adquirieron en una tienda de electrónicos de la cadena Radio Shack, en México,

Las charlas en altavoz revelaron detalles de envíos y planes de alianza con otros grupos criminales en territorio estadounidense.

"Mi hermano y yo estábamos solos. No teníamos un equipo SWAT de la DEA cubriéndonos la espalda. Solo éramos nosotros", dijo al detallar que su colaboración con las autoridades inició a principios de 2008, aunque mantuvo su actividad delictiva, “porque sería muy sospechoso se hubiera detenido de repente”.

Flores se entregó a las autoridades en noviembre de 2008 y cumple una condena de 14 años después de haber cooperado en el procesamiento de otras 50 traficantes, dijo Fels.

El abogado de Guzmán, William Púrpura, comparó la voz de Guzmán en las conversaciones telefónicas con su voz en el conocido video que hizo para la revista Rolling Stone y puso en duda de que se tratara de la misma persona.

“Tenemos que confiar en su palabra de que se trata de la voz de él (Guzmán) ¿no?”, preguntó Púrpura a Flores, en tono sarcástico.

“Sí”, respondió Flores.

Contáctanos