Durante las protestas ocurridas durante el fin de semana en San Francisco, un total de 87 personas fueron arrestadas por violar la orden de toque de queda
Agentes confiscaron explosivos, cócteles molotov, ladrillos y otras armas, informó Bill Scott, jefe de policía de la ciudad.
Scott dijo que entre 5 mil y 6 mil personas tomaron las calles el domingo para protestas por la muerte de George Floyd a manos de la policía de Minneapolis.
El oficial describió una escena hostil, en la que se arrojaron objetos contra los agentes.
Scott indicó que entre los arrestados, los oficiales recuperaron un arma de fuego cargada y una mochila llena de fuegos artificiales y explosivos, entre otras armas.
La Oficina de Servicios de Emergencia de California envió alrededor de 200 oficiales adicionales el domingo desde otras ciudades y condados de California a San Francisco para ayudar con las protestas y hacer cumplir el toque de queda, de acuerdo a Scott.
Si bien Scott reconoció que la mayoría de las protestas del fin de semana fueron pacíficas, dijo el sábado en particular que los oficiales se sintieron abrumados por las protestas y los saqueos, que dañaron varias tiendas en el centro de la ciudad y el área de Union Square.
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También dijo que los agentes presuntamente vieron a una camioneta repartiendo ladrillos para tirar a los oficiales.
"Mucha gente perdió mucho; las empresas fueron destruidas; las empresas fueron saqueadas; la propiedad se perdió. Esos son desafíos económicos reales y ahora las personas, muchas de las cuales se han pasado la vida construyendo su sustento, tienen que reiniciar y tomar otro golpeó por encima de lo que tuvieron que asumir debido a COVID-19 ", dijo.
Según Scott, 33 personas fueron arrestadas el sábado en relación con el saqueo. Diecinueve de esos casos han sido entregados a la Oficina del Fiscal de Distrito de San Francisco por posibles cargos.
"Aceptamos protestas pacíficas; aceptamos en la ciudad de San Francisco a las personas que se expresan. No aceptaremos la violencia contra nadie; contra otros manifestantes; contra los agentes de policía; contra la propiedad. No aceptaremos eso", dijo.
Scott también reconoció que el Departamento de Policía de la ciudad tiene que trabajar en las reformas policiales descritas por el Departamento de Justicia de EEUU en 2016 en medio de una serie de polémicos tiroteos policiales, incluidos Mario Woods en 2015 y Jessica Williams en 2016.
"Entiendo lo que nos trajo aquí", dijo. "Para las personas que quieren expresarse, son bienvenidos en San Francisco. Pero necesitamos que lo hagan pacíficamente".
El Alguacil Paul Miyamoto agradeció a los organizadores de la protesta y a la mayoría de los manifestantes por adherirse al toque de queda del domingo.
Dijo que aunque la población carcelaria de la ciudad sigue siendo baja debido a la pandemia de coronavirus y la orden de encierro preventivo, aumentó ligeramente durante el fin de semana. Hasta el lunes, 64 de las 87 personas arrestadas el domingo habían sido liberadas, mientras que 23 permanecen bajo custodia.
La jefa de bomberos de San Francisco, Jeanine Nicholson, dijo que el domingo, el departamento recibió 140 llamadas médicas de emergencia y 50 llamadas relacionadas con incendios, y los bomberos extinguieron un total de 20 incendios.
"El sábado fue mucho más alto que eso", dijo.
Nicholson también recordó a los manifestantes que continúen usando sus máscaras y practiquen el distanciamiento social para limitar la propagación de COVID-19.
Con más protestas programadas, autoridades indicaron que habrá toque de queda a partir de las 8:00 p.m.
Scott dijo que el Departamento de Policía sigue teniendo personal completo y que los oficiales serán enviados a toda la ciudad el lunes por la noche.
También alentó a los manifestantes o miembros del público que desean presentar una queja contra cualquier miembro del personal de las fuerzas del orden público a hacerlo al Departamento de Responsabilidad de la Policía de la ciudad al (415) 241-7711 o en https://sfgov.org/dpa.
