Muchos residentes de Richmond dicen estar consternados luego de que dos hermanitos fallecieron en un accidente automovilístico el fin de semana.
La escuela que los pequeños Citlali y Jesse Contreras, tiene un altar con rosas blancas en medio del patio de juegos. “Ha sido muy duro porque hemos perdido dos alumnos que eran extraordinarios”, dijo Peppina Liano, directora de Richmond College Prep.
Los niños viajaban con su familia por el Condado Kern cuando al parecer la madre perdió el control del auto y los menores salieron expulsados. Las autoridades creen que no tenían puesto el cinturón de seguridad.
Los otros cuatro ocupantes sobrevivieron, entre ellos otro hermano que está en séptimo grado.
“Los conozco hace desde hace muchos años, emiten humildad, respeto, colaboración con la escuela”, dijo Peppina.
Yajaira Martínez, madre de una compañera de Citlali, dijo se le ha dificultado consolar a su hija.
“Mi hija no puede dormir y se pregunta cómo está la mama, que dolor tiene la mama, me parte el corazón”, dijo Martínez. “Le duele, sus amiguitos y eso, pero me dice ‘mama, ellos están en una vida mejor pero la mama”.
Aunque la familia pidió privacidad, Liano ha conversado con la mamá y dice que le dijo, “¿Por qué no me pasó a mí? ¿Por que se me murieron mis niños? A mí me debió haber pasado, yo ya viví”.
La tragedia ha conmovido tanto a la ciudad que algunos que ni conocen a la familia, se han movilizado para ayudarlos.
Marcela Catena es instructora de zumba y en su estudio ha convocado una megaclase para el viernes por la noche a beneficio de la familia a la que ya se han sumado más de 8 instructores del todo el Área de la Bahía.
“Creo que es lo que necesitamos unidad, apoyar a la gente que necesita y lo podemos hacer con nuestro trabajo, donar nuestro tiempo”, dijo Catena.
