Reportaje Especial: La metamorfosis de Pablo Gaxiola

Para muchos exreclusos, reingresar a su comunidad es muy difícil. Sin embargo, la ayuda que necesitan para hacer el cambio está más cerca de lo que piensan.

“Personas nos miran como ... no vamos a ayudarlo a ellos, no vamos a darle trabajo porque van a volver a hacer lo mismo”, dijo Pablo Gaxiola.

Ese estigma es el que Gaxiola lo ha marcado desde su adolescencia. El ingreso al sistema penal del Condado de Santa Clara a los 12 años por una agresión agravada, pero dice que el vender narcóticos fue lo que lo mantuvo tras las rejas hasta los 35 años.

Los tatuajes en su rostro, cuello, y manos son un permanente recordatorio de un pasado criminal que dice aún lo atormenta.

“Llegó a un lugar y primero miran eso, no me miran a mí”, dijo Gaxiola.

Los sospechosos, captados por cámaras de vigilancia, ingresaron a la vivienda mientras la víctima se encontraba en el patio del inmueble. Los ladrones se llevaron una caja fuerte con ahorros de la familia, joyas, pasaportes, tarjetas de crédito y certificados de nacimiento.

Sin embargo, cada mañana, portando su mejor actitud, sale hacia su trabajo para erradicar esa noción y cambiar las vidas de otros exreclusos.

“Ayudamos a personas que están saliendo, y yo agarro la oportunidad para decirle a las personas que están llegando, en su primer día, que es posible”, dijo Gaxiola.

Al ser liberado en el 2014, Gaxiola busco ayuda y la encontró mediante al Centro de Reingreso del Condado Santa Clara.

“Anualmente vienen más de 5,000 personas a este centro aquí en San José”, dijo Víctor Muñíz, portavoz del Centro de Reingreso del Condado Santa Clara.

Solicitantes, en su mayoría exreclusos, dice Muñíz, llegan en busca de esa segunda oportunidad vía entrenamiento y empleo.

Los combates entre fuerzas kurdas y los pocos que quedan del grupo terrorista arreciaron.

“Los clientes tienen que ser residentes del Condado Santa Clara y ser liberados de la custodia en los últimos 12 meses”, dijo Muñíz. Agregando que la implementación del proyecto de ley AB 109 en el 2011, mejor conocida como realineación, ha contribuido significativamente en el número de reincidencia en el condado, un descenso del 46 a 36 por ciento en el 2017.

Algo reflejado en la metamorfosis de Gaxiola, quien dice ahora utilizar sus malas experiencias para guiar a otros por el buen camino.

“Yo no voy a regresar ... yo no voy a ir para atrás, nada más voy siguiendo adelante”, dijo Gaxiola.

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