La ciudad de Oakland recortará $ 29 millones en gastos de personal, cumplimiento de la ley y seguridad pública en un esfuerzo por cerrar su déficit proyectado de $ 62 millones, dijeron el martes funcionarios de la ciudad.
La ciudad recortará $ 9 millones en gastos generales al promulgar un congelamiento de contrataciones, reducir el uso de personal temporal, congelar el gasto discrecional, recortar el salario de los miembros del personal senior que no están sindicalizados y usar fondos no gastados del último año fiscal, que terminó el 30 de junio.
La ciudad también recortará el presupuesto del Departamento de Policía de Oakland en $ 15 millones al reducir las horas extra y el uso de unidades y programas especializados y el presupuesto del Departamento de Bomberos de Oakland en $ 5 millones al cerrar temporalmente tres estaciones de bomberos entre enero y junio.
Los recortes entran en vigor de inmediato y durarán al menos hasta el final del año fiscal, según funcionarios de la ciudad.
En una carta al personal de la ciudad la semana pasada, la alcaldesa de Oakland, Libby Schaaf, y el administrador de la ciudad, Ed Reiskin, advirtieron que la ciudad será insolvente antes de que finalice el año fiscal sin reducciones significativas de gastos.
"La Ciudad no podrá financiar servicios esenciales o responder a emergencias como un terremoto o un desastre natural", dijeron Schaaf y Reiskin en la carta. "Incluso la reserva de emergencia de la ciudad estará completamente agotada”.
"Aunque Oakland no está solo en esta crisis, esta situación representa uno de los desafíos financieros más serios que jamás haya enfrentado la Ciudad de Oakland", dijeron.
Local
Funcionarios de la ciudad esperan que el déficit se reduzca aún más con los fondos de ayuda del gobierno federal y que la pandemia de coronavirus retroceda en la primera mitad de 2021 a medida que más personas se vacunen.
