Más de 50 oficiales del Departamento de Policía de San José resultaron contagiados con COVID-19 afectando así a la unidad de patrullaje.
El departamento se ha visto en la obligación de pagar horas extras para que los agentes que no se encuentran enfermos cubran los puestos de lo que están en cuarentena.
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“Nos estamos dando cuenta que el COVID-19 está afectando a muchas empresas, a muchas compañías y nosotros no somos ninguna excepción”, explicó Christian Camarillo, vocero de la policía.
Actualmente, hay 52 empleados fuera de sus labores de los cuales 45 son oficiales que se dedican a patrullar las calles de la ciudad.
Camarillo aseguró que los agentes que más se han visto afectados por la pandemia son los que atienden emergencias al estar en contacto con más personas.
“Es muy fácil decir que obviamente tienen más contacto con personas, con el público donde se están enfermando y contagiando más, tenemos 7 que no tienen contacto con esos detectives, entonces el número de nuestros oficiales que están con el público son los que están más afectados ahorita”, dijo Camarillo.
La unidad de patrullaje está conformada por un total de 525 agentes por lo que como medida de contingencia están pidiendo que trabajen, voluntariamente, tiempo extra para cubrir esos turnos.
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“Ahorita estamos sobreviviendo porque tenemos muchos oficiales que están trabajando tiempo extra voluntariamente”, afirmó Camarillo.
Ante esta situación, el departamento y la ciudad han establecido un plan que los ayudará a atacar esta problemática en caso de que continúen en aumento los contagios entre los oficiales.
“Si siguen aumentando, tal vez vamos a tener que asignar oficiales que no están asignados para trabajar en la patrulla a que vayan a trabajar en la patrulla”, aseguró Camarillo.
Una medida que ha causado descontento en el sindicato de policías que afirmaron a través de un comunicado:
“Desplegar detectives para patrullar es como robarle a pedro para pagarle a pablo, porque las víctimas de robo, violación y otras agresiones tendrán que esperar más tiempo para que resuelvan su caso. La solución es utilizar los millones de dólares de ayuda federal por la pandemia para pagar horas extras, puesto que la falta de oficiales ya se veía venir incluso sin la aparición de Ómicron”.
