Menlo Park

Don Chava, el abuelito Sastre de Menlo Park, muere a sus 90 años

“Los doctores me dijeron que mi papá se iba en 10 minutos por si queríamos llegar, lo que hice fue agarrarle su mano y le dije ¿papá tienes dolor? y me dijo ´no, solo quiero descansar ´y se fue”, relató Griselda Patiño, hija de don Chava. 

Telemundo

Un abuelito sastre conocido y muy querido por la comunidad murió a sus 90 años en Menlo Park.

Salvador Patiño mejor conocido como “Don Chava” trabajaba desde la cochera de su vivienda.

Don Chava llegó a Estados Unidos a los 60 años y abrió su negocio.

“Sus clientes y sus clientas llegaban y para él era como familia, se sentaban a hablar con él, les hacia el trabajo y después les ofrecían lo que él estuviera comiendo o lo que él estuviera tomando”, indicó Griselda Patiño, hija de Don Chava.

A Salvador le gustaba trabajar tanto así que una de sus hijas aseguró que todos los viernes caminaba dos horas con un carrito buscando latas y botellas para reciclarlas, y se levantaba a las 5:00 a.m., para hacerlo, fue con ese trabajo que logró comprarse un auto.

Su familia le hizo este altar en su memoria.  

“Los doctores me dijeron que mi papá se iba en 10 minutos por si queríamos llegar, lo que hice fue agarrarle su mano y le dije ¿papá tienes dolor? y me dijo ´no, solo quiero descansar ´y se fue”, relató Griselda. 

Él tenía cinco arterias tapadas en su corazón y los doctores no le podían hacer una cirugía por su edad.

Griselda afirmó que la comunidad les ha dado apoyo en este momento tan difícil.

“Llegó una señora y nos trajo comida aquí. Salimos de la casa y encontramos soda, aguas encontramos flores, velas encontramos bastantes cosas que le traen”, indicó Griselda.  

Griselda indicó que su padre mantuvo su sentido de humor hasta el último día, iba a cumplir 91 años en febrero.

“Le preguntó a un doctor cuántos años más quiere vivir usted tiene 90 le dije, papá unos 30 años más y me dijo yo quiero vivir como matusalén 400 años”, recordó Griselda.  

Y es así con ese humor, y esa alegría como la familia Patiño quiere que recuerden a su padre.

“Es un ejemplo a seguir a ser incansable a trabajar”, dijo Griselda.

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