El Concejo de la Ciudad de Palo Alto tomó la decisión de desalojar a los más de 400 residentes del parque de casas rodantes Buena Vista.
Los concejales votaron de forma unánime durante una reunión el martes a favor de cerrar el parque móvil, el único que queda en la ciudad.
La decisión pone fin a casi tres años de lucha entre los residentes del parque y los dueños del terreno, quienes solicitaron su cierre en el 2012 para venderlo a un desarrollador de bienes raíces.
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“Con mucho sacrificio tuvimos esa casita y ahora pues ya no la tenemos”, dijo Umbelina Martínez, residente de Buena Vista y quien asistió a la junta de los concejales acompañada de sus hijos. “Es un poco difícil para personas como yo. Soy una mamá con cuatro niños en casa así que para rentar un lugar a donde quiera que yo vaya va a ser complicado”.
El condado de Santa Clara y Caritas, una organización sin fines de lucro que maneja una veintena de parques móviles en California, intentaron llegar a un arreglo con los dueños de la propiedad y comprarla. Sin embargo, los dueños no se expresaron ante la oferta.
Buena Vista, ubicada en el Camino Real, tiene 104 residencias móviles, 12 estudios y una casa de una habitación, y ha servido como parque de casas rodantes por 88 años, según el portal Friends of Buena Vista.
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Por ley, los inquilinos deben de recibir el valor de su casa móvil, un subsidio para la renta y costos de mudanza, que concejales estiman podría ser entre $12,000 y $29,000. Pero para muchos, esta cantidad no es suficiente. El costo de renta promedio en Palo Alto es de $3,800, según la compañía de bienes raíces Zillow.
Alrededor de 100 niños que viven en el parque y son parte del Distrito Escolar Unificado de Palo Alto, también se podrían ver obligados a cambiar de escuela a raíz del desalojo, según Friends of Buena Vista.
