Caso Cerrado: Vendo gorros para penes

Augusto está probando sus dotes como empresario y acaba de echar a andar un negocio de comercio a través del internet.

Le pidió un préstamo de 3,500 dólares a su suegra, Manuela, para lanzar al mercado un producto poco convencional: sombreros para el pene.

Manuela ahora está demandando a Augusto porque dice que aparte de que su negocio es vergonzoso, éste está “echando a perder” a su hija.

¿Crees que está en lo cierto o simplemente está exagerando?

Gracias por consultar este "caso cerrado" de la doctora Polo. ¿Qué opinas del fallo final? Coméntalo a continuación de estas líneas.

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