Visiblemente afectado José Ávalos, de 38 años de edad, relató el horror que vivió cuando un voraz incendio de 3 alarmas se registró en el almacén “Barco Fantasma” el viernes en Oakland.
Ávalos rentaba desde hace 2 años un espacio en el primer piso de la estructura al que llamaba su estudio de arte. El viernes alrededor de las 11:20 p.m., escuchó cuando una persona gritó “fuego” e intentó desesperadamente salir del lugar “andaba tratando de abrir y no pude y había mucho humo, finalmente abrí la puerta y ya estaba toda incendiada mi entrada”.
Según José el incendio era tan intenso que “se miraba como si el sol estuviese allí por tanta lumbre”. Desesperado el joven hispano salió corriendo de la vivienda sin zapatos, en pijamas y con sus 2 mascotas, mientras trataba de escapar de las llamas se tropezó con una persona “no más volteó y me miró con ojos grandes, estaba asustada y no sabía a dónde ir”.
Durante el escape Ávalos pensó que iba a morir pero el amor por sus mascotas lo hizo reaccionar “dije yo me voy a morir, pero dije no, no puedo dejar que mis perros se mueran”, afirmó.
El joven que se desempeña como instalador de gabinetes dijo que durante el incendio dentro de la estructura no se escuchaba nada, sin embargo cuando salió logró escuchar el pánico de las personas que aún se encontraban dentro del edificio “es tremendo, es lo más peor que pudo pasar”.
José afirma que en el lugar vivían al menos 20 personas más y además aseguró que la policía y los bomberos tenían conocimiento de que el almacén estaba habitado.
